Prevención contra el ébola en Argentina


Información sobre el ébola por Efraín Benzaquen 


Hace pocos días escribí un artículo para darle difusión al problema del ébola y para estimular la presencia del tema en la agenda pública, ya que es la única forma de contribuir a que se tomen todas la medidas necesaria para no ser víctimas de esta nueva epidemia.

El día seis de octubre los medios internacionales difundieron la noticia del primer caso adquirido en territorio europeo, más precisamente en España. En términos sanitarios este contagio resulta inverosímil ya que se habría producido en el ámbito intrahospitalario desde un paciente que fue trasladado desde África precisamente por estar infectado. Es decir que el contagio se debió a un mal manejo de la situación. Aún no está claro si se trata de un sólo caso o si aparecerán nuevos infectados, pero lo que si está claro es que debemos estar preparados para que no nos ocurra una situación similar.

En este contexto esta nota busca ser un aporte para una mejor comprensión del ébola.  

Origen del virus de ébola

El virus de ébola recibe su nombre por haber sido identificado en el río Ébola, en la República Democrática del Congo. En la actualidad se conocen en 5 cepas de este virus de las cuales 3 han generado grandes brotes de la enfermedad. Este virus causa una fiebre hemorrágica que afecta múltiples órganos y tiene una alta tasa de letalidad.

Cuando hablamos de tasa de letalidad nos estamos refiriendo a la proporción de personas que fallecen sobre los que fueron infectados. En tal sentido, aproximadamente entre un 50 y un 90 por ciento de los infectados por el virus de ébola mueren. 

Prevención contra el ébola en Argentina

La prevención del contagio en nuestro país está centrada en la vigilancia de las fronteras. Es importante controlar que no ingresen al país personas que hayan estado en los países afectados sin realizar los correspondientes controles y seguimientos. Hay que estar atentos a la presentación de algún tipo de síntomas, especialmente teniendo en cuenta que en algunos casos las manifestaciones de la enfermedad aparecen con un período hasta 21 días entre el contacto con el virus y la aparición de la enfermedad.

También es bueno evitar, en cuanto sea posible, los viajes a las zonas afectadas. Si tomamos todas las medidas que corresponden las probabilidades de que nos llegue la epidemia son bajísimas. Las medidas de prevención en los países afectados incluyen: evitar el contacto con animales salvajes como murciélagos y monos que son portadores de la enfermedad. Usar protección para la manipulación de animales de granja que puedan ser susceptibles.

Cocinar bien los alimentos especialmente la carne. Lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón. Evitar en lo posible el contacto con personas enfermas y en caso necesario hacerlo con protección. El personal sanitario que intervenga en el tratamiento de las personas afectadas debe utilizar indumentaria adecuada. Los animales de granja que estén infectados se deben incinerar. Sepultar rápidamente y en forma segura las personas fallecidas por enfermedad. Evitar las relaciones sexuales sin protección hasta nueve semanas después de la curación. 

Cómo se contagia el ébola

El contagio de la enfermedad se produce por contacto con fluidos corporales de personas o animales infectados. Es importante destacar que los cadáveres mantienen su capacidad de contagiar. Por tanto, se debe tener máximas precauciones en la manipulación de los mismos, sean animales o personas. El reservorio natural del virus serían ciertos murciélagos del África que se alimentan de frutos.

Estos murciélagos son capaces de contagiar a otros animales y a los seres humanos pero no presentan ningún síntoma ni enfermedad por el virus. El actual brote comenzó a fines del 2013 en Guinea y se extendió a varios países de África, Sierra Leona, Nigeria y Liberia. Asimismo se habría generado un segundo brote en la República Democrática del Congo. La Organización Mundial de la Salud a manifestado su preocupación por una posible extensión a otros 15 países de África si no se modifican rápidamente las condiciones socio sanitarias.

El virus ingresa al organismo por las mucosas o por laceraciones de la piel que han entrado en contacto con secreciones corporales de animales o personas enfermas, ya sea en forma directa o a través de distintos objetos como la ropa, herramientas etc. Desde ese momento comienza un período de incubación que puede durar entre 2 y 21 días antes de que comience a manifestarse la enfermedad. 

Síntomas

Los primeros síntomas son fiebre alta, dolor muscular, dolor de cabeza, dolor de garganta y un estado de malestar general con gran debilidad. Posteriormente se pueden presentar vómitos, diarrea, sarpullidos y continúa con falla multiorgánica progresiva. Es decir pérdida del funcionamiento de órganos vitales como el riñón, el hígado, etc. Finalmente se producen hemorragias masivas tanto internas como externas.

Las pruebas de laboratorio nos pueden dar un diagnóstico de certeza ante la sospecha de la presencia de la enfermedad. Dado que la enfermedad contagia durante la etapa sintomática y a posteriori, es fundamental el aislamiento de las personas enfermas para evitar la propagación de la enfermedad. Es importante destacar que se ha detectado la presencia del virus en el semen de los hombres curados hasta nueve semanas después de la desaparición de los síntomas.

Una de las pocas ventajas que nos da el virus de ébola es que la contagiosidad se produce durante la etapa sintomática y con posterioridad a la misma. Esto debiera facilitar la prevención del contagio persona a persona si tuviéramos los elementos, conocimientos y concientización necesarios. También nos podría ayudar a evitar el contagio desde animales infectados, a excepción del mencionado murciélago frugívoro. 

Tratamientos y vacuna en proceso

No existe un tratamiento específico para la enfermedad causada por el virus ébola. Por tanto las personas afectadas son sometidas a terapia de sostén de las funciones vitales. Si bien la letalidad disminuye con el tratamiento oportuno sigue siendo alta. Durante agosto de 2014 se han informado avances importantes en la investigación de posibles futuros tratamientos con anticuerpos monoclonales y un laboratorio estadounidense dice haber desarrollado una vacuna que ha mostrado un cien por ciento de efectividad en otros primates pero aún no ha sido probada en seres humanos.

*Efraín Benzaquen es Médico Sanitarista. Jefe de Trabajos Prácticos del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires.